Capítulo 727
Adrián le dijo friamente: “Ponte la ropa!” La dejó sola en la habitación y se marchó sin piedad.
Por supuesto, ella creia que él no era un hombre cualquiera, sabía de su autocontrol y sus estrictos principios.
Pero, ¿por qué el control de si mismo y los principios de un hombre tan disciplinado como él fallaron con Esther?
¿Por qué?!
Recibió una llamada desconocida. Esther pensó que era la comida que habla pedido, asi que respondió sin pensarlo mucho, “Hola, hola!”
Sin embargo, la persona al otro lado del teléfono no habló durante un largo tiempo.
Esther frunció el ceño con curiosidad, “Hola, quién es? ¿No puedes oirme?”
“Si, puedo oirte.”
Era la voz de un hombre.
Esther la reconoció al instante, era la voz de Leonardo.
Estaba un poco sorprendida, Leonardo nunca le había llamado
Mirando a Patricia, que estaba sentada junto a ella con malas intenciones, se preguntó si Leonardo necesitaba que hiciera algo por Patricia otra vez
Entrecerró los ojos y preguntó “Eh, qué necesitas de mi?”
Leonardo dijo: ¿Tienes tiempo para reunirte conmigo hoy? Tengo algo que quiero decirte en persona.”
“No es muy conveniente”
Ella lo rechazó sin pensarlo, solo quería mantenerse alejada de esos dos hermanos.
No les tenia miedo, solo que cada vez que se metía en problemas, era una pérdida de tiempo.
“Espera, no cuelgues todavial”
Leonardo adivino que estaba a punto de colgar y la detuvo a tiempo.
El dedo de Esther se detuvo, “Si tienes algo que decir, ¡dilo por teléfono!”
Él suspiro. “Durante este tiempo, me he sentido muy mal, te malinterpreté demasiado… Esther, ¿puedo verte en persona? Tengo algo muy importante que decirte, no te tomará mucho tiempo.”
Mientras hablaban por teléfono, Patricia estaba sentada al lado con una taza de leche, mirándola fijamente.
Esther pensó por un momento, “Bueno, entonces ven a buscarme a casa de los Gómez.”
Leonardo se sintió incómodo, “No es muy conveniente para mi ir alli, ¿podrías salir?”
“¡Entonces olvidalo!”
Esta vez, Esther colgó directamente el teléfono.
Por la mañana, Zeus la había llamado para decirle que Leonardo quería reunirse con ella y en ese momento él la llamó directamente, jeso era muy
extraño!
¡Humph, qué tan inusual seria esa situación!