Capítulo 726
Cuando Verónica dyo eso, Esther ya se habia sentado en el solà del salón, ignorando completamente las burlas de Verónica, ocupada pidiendo comida con su teléfono
Verónica sintió que sus palabras no podian afectarla, se sentia como si estuviese golpeando algodón, se sentia incómoda. Ella elevó su voz y continud. diciendo Tanto tiempo para pedir comida, seguro que el dinero que tienes apenas te alcanza para pedir el platillo más barato!”
Patricia ya no podia contener la risa, pero aun así fingró ser amable y aconsejo Vero, no hables asi, de todas formas, tenemos que respetar las costumbres de las demas”
Veronica revola los ojos y resoplo friamente “Pero solo estoy diciendo la verdad! (Ella es una chica del campo, no es de nuestro mundo! Incluso si ahora puede atraer a mi hermano, sus valores son diferentes, no duraran! No tiene autoconciencia, y aun asi quiere quedarte en nuestra casa”
A Esther no le importaban las burlas de Veronica, ya habia hecho su pedido y pagado, y Adrián también había recibido un mensaje de deducción de gastos La noche anterior, el Sr. Perfecto le habia dicho todas sus contraseñas le habia dado varias tarjetas bancarias privadas, demostrando su determinación de querer pasar el resto de su vida con ella.
Aunque Esther no necesitaba dinero, de vez en cuando era agradable usar el dinero de su novio.
Mientras Verónica sequia diciendo cosas desagradables, Esther parecia no escuchar, se recostó perezosamente en el sofá, encendió la televisión y espero su comida De repente, una taza de leche apareció frente a ella.
Esther miró, era Patricia quien se lo ofrecia En ese momento, esta última sonrela gentil y sinceramente. Esther, probablemente todavia tomará un rato hasta que te llegue la comida, ¿verdad? Bebe un poco de leche para calmar el hambre, no te vayas a desmayar de hambre!“.
Esther miro la taza de leche que Patricia le ofrecia, en el borde de la taza habia una visible marca de lápiz labial, era de ella
¡Qué interesante era Patricia al ofrecerle a alguien más la leche que ella misma labia bebido!
Esther no se enfado, gentilmente rechazó la leche y sonrió “Gracias por tu amabilidad, pero no tengo tanta hambre, puedes beberte la leche tu misma”
Patricia se sentó a su lado decepcionada y dijo juguetonamente: “Esther, ¿por qué no bebes? ¿Es porque yo la bebi antes? Pensé que no te importaria, después de todo, aceptaste a mi ex novio. ¿No?“.
Esther levantó una ceja, mirandola de reojo: Tu ex novio?“.
Patricia rio a carcajadas “Si, Adri, ¿no? Mi ex que tú aceptaste. ¿Cómo es que ahora te parece sucio beber la leche?“.
Esther la miro y le pregunto: ¿Acaso él te tocó alguna vez?”
Patricia asintió: “Por supuesto, acaso creias que Adrian no había tenido novia antes de ti? Eso es imposible! Un hombre tan sobresaliente como Adrian, que nunca le faltaron admiradoras, ¿como podría llegar a los treinta sin haber tenido novia?“.
Esther la volvo a mirar seriamente, permaneció en silencio por un momento, Patricia incluso pensó que ella se lo había creido y se habia enfadado. Entonces. Esther se comenzó a reir burlonamente, como si hubiera escuchado in chiste “Señorita Ibarra, antes intentaste hacerme creer que le habias dado un hijo a Adrian, y ahora intentas hacerme creer que tuvieron relaciones? ¿Crees que todavia confiaré en tus palabras?”
La cara de Patricia se quedó dura por un momento, luego empezó a reir burlonamente de nuevo: “Aunque no haya tenido relaciones conmigo, ¿crees que un hombre tan vigoroso como Adrian solo ha tenido a una novia?“,
Esther sonrio levemente “Comprobe a mi manera que, en realidad, solo ha estado conmigo“.
Patricia funció el ceño. ¿Estás segura? ¿Cómo lo verificaste? Sé que las mujeres pueden verificar, pero los hombres? Esther, deja de engañarte a ti
misma“.
Esther soltó una risita “No te puedo decir cómo lo verifiqué, es la privacidad de Adrian. En fin, estoy segura de que Adrian es inocente de lo que dices”
La seguridad y la determinación en el rostro de Esther, así como esa dulzura inadvertida que mostraba, fueron suficientes para que el rostro de Patricia se volvera muy seno en un instante
La mano de Patricia que sostenia la taza de leche se apretaba cada vez más, como si quisiera aplastar la taza de leche, despedazar a Esther! Ella aun recordaba cuando se emborracho a proposito y se desnudo frente a Adrián, y él ni siquiera la miro dos veces, mucho menos la tocór