Capítulo 768
Cuando Adrián bajo, vio a Pedro al lado de Esther, preparándole muchos postres.
Al ver esta escena, funció el ceño y se detuvo
“Ven aca”
La voz de Adrián hizo que todos los que estaban charlando se callaran de inmediato.
Esther estaba disfrutando de la comida, miró a Adrián cuando escuchó la voz, él la miraba con seriedad, pero ella continuo comiendo.
Al ver que todavia estaba comiendo, Adrian frunció de nuevo el ceño. ¿Aún no vienes?”
Por fin, Esther se levantó y rodeó la mesa, todavia sosteniendo el postre en su mano, “¿Qué te pasa? ¡Vuelves y ya estás tan gruñón!”
Adrian extendió su brazo largo y rodeo su cintura delicada, atrayendola hacia él, primero le quitó el postre de la mano, y luego dijo: ¿No te he dicho que no puedes comer cosas tan dulces?”
Esther puso una mueca, “Te tardaste mucho en bajar, me aburri, no puedo beber alcohol, no puedo pasar el tiempo comiendo un poco de postre?”
Esto hizo que Adrián se sintiera preocupado, se dio cuenta de que el problema era más serio de lo que pensaba.
“Hmm, Bueno, es mi culpa por hacerte esperar. Puedes castigarme, pero ya no puedes comer postre“.
Esther hizo una mueca y resopló.
Viendo a Adrián tan gentil, Gerald se apoyo en Johan con su vaso de vino, bromeando:
“¡Adri, no pensé que este dia llegaria!”
Adrián le lanzó una mirada de reojo, ignorándolo.
Gerald volvió a bromear: “Esther, Adrián acaba de decir que puedes castigarlo, no seas timida, castigalo fuertemente, para que recuerde que no puede dejarte aqui sola otra vez!”
Johan siempre se mantuvo al margen de los problemas de amor de sus amigos, solo bebía en silencio.
Pero Pedro se sonrio y añadió: “Esther, ¿cómo planeas castigar a Adri?”
Esther se frotó su mentón pensativamente, “¿Crees que debería estar arrodillado sobre el control remoto o sobre la tabla de lavar?”
Josefina levantó la mano, sugiriendo enérgicamente: “Hazlo arrodillarse en un durian! Esther, puedes comer la carne del durian mientras Adri se arrodilla en la cáscara, ¡perfecto!”
Gerald aplaudió: “Está bien, muy bien. ¡Pagare por este durian y enviare a alguien a tu casa en un rato!“.
Adrián los miró con frialdad, no tenía tiempo para bromear con ellos aquí, dijo serio: “Se está haciendo tarde, primero la llevare a casa, ustedes siguen jugando, todos los gastos se cargarán a mi cuenta“.
Gerald se quejo “Eh, Adri, apenas estamos empezando y ya te vas a casa, estás ansioso por arrodillarte en el durian?”
Se preparaban para irse, hacia frío afuera, Adrián se quitó el abrigo y se lo puso a Esther, susurró: “En realidad, podría quedarme con ustedes hasta que amanezca, pero ella necesita descansar. Tendremos otra oportunidad para reunirnos.”
Gerald movió la cabeza, levantó su copa y dijo: “Eh, ¡nos olvidaste despues de casarte!”
Mientras hablaba, se levantó, se acercó y bromeó: “Un momento no la dejas comer snacks, al siguiente te preocupas de que tenga frio y rápidamente le pones la chaqueta, y siempre te preocupa que no duerma bien. Adri, parece que no te has casado, ¡parece que has adoptado una hija!”
Adrián le lanzó una mirada molesta, “Largate!
Johan no pudo soportar la perturbación de Gerald, se levantó y empujó a Gerald a un lado, y dijo: “¡Adri, no le hagas caso, solo bebió demasiado y estaba buscando un lugar para desahogarse!”
Adrian asintió, no iba a pelear con su amigo de toda la vida.
Johan volvió a preguntar: También bebiste, trajiste un conductor? Si no, te puedo llevar a casa“.
Adrián negó con la cabeza, “No, sigue aqui bebiendo con ellos.”