Capítulo 41
Al pensar en eso, Adrián se puso aún más contento, alzó la mano para pellizcar la barbilla de Nerea.
Nerea sintió miedo, cerró los ojos y sus pestañas comenzaron a temblar.
“Lievense a esta linda señorita. Tu, ven conmigo arriba, te mostraré algo emocionante”
Gabriela supuso que Adrian no le haria daño de verdad. En el Bar Galeria del Cielo, si ella pedia ayuda, un guardaespaldas profesional vendría enseguida
Pero ese en después de todo, el lugar preferido de los ncos y famosos, si los demás lo veian, la que se avergonzaria seria ella
Ella todavia necesitaba hacer negocios en el futuro, si la ponian en la lista negra, temia que no pudiera moverse en ese circulo
¿Cuando mencionas algo emocionante te refieres al casino que está arriba?”
Adnan levantó una ceja y luego se dingió hacia arriba “Si, parece que tienes experiencia
Gabriela no dijo nada, vio las lágrimas de Nerea a punto de caer Dejala ir primero, yo jugaré contigo”
Como Adrian, estaba más interesado en Gabriela que en Netea, no dudo “Acepto tu propuesta, pero esta noche tienes que hacerme feliz.”
Gabriela miro a Nerea, todavía no entendia por qué Nerea estaba en el bar
‘Nerea, vele a casa”
El guardaespaldas soltó a Nerea, su rostro se volvió cada vez más pálido. “Pero tú
“Estoy bien”
El tono de Gabriela era indiferente “Si tienes la oportunidad, deberias explicar por qué vendrías a este tipo de lugar sola.
Nerea bajo la cabeza, sus labios estaban apretados, fue al bar porque el estaba alli esa noche, solo queria mirarlo de cerca, por eso no pudo–resistirse
No esperaba encontrar a Gabriela Gabriela siempre vivia de manera frugal, ¿cómo podria tener una tarjeta de membresia de dos millones?
“Lo siento, hermana, se que me equivoque, me voy enseguida”
Miro con nostalgia hacia arriba y luego se fue decepcionada.
Gabriela siguió a Adrián, el intento rodear su cintura, pero escuchó que decía: “El Sr. Sagel es un hombre con un fuerte sentido territorial, no quiere que nadie toque lo que le interesa
La cara de Adrian se oscureció, resultó que ella había visto a través de sus intenciones
Se sintió avergonzado Sabias que Sebastian está aqui, estas jugando conmigo?”
“Solo queria advertirte amablemente”
La sonrisa de Gabriela parecia muy inocente, pero en los ojos de Adrian, parecia una provocación
Realmente crees que porque tuviste algo con Sebastián, él se preocupará por ti? Veremos
Ya estaban en el tercer piso Las camareras y las chicas de los tragos vestian uniformes en blanco y negro, cada mesa de lujo estaba llena de personas jugando.
Gabriela vio de inmediato a Sebastian sentado en el centro, parecia desinteresado en el juego, solo jugaba casualmente.
Fabio Milanes se sentó a su lado, viendo su desinterès, no “Eres un buen tipo para regalat dinero.”
La mitad de las fichas frente a Sebastian ya se habian ido, mientras que los demás en la mesa habian ganado mucho, lo velan como dinero.
Se sentó alli, incluso su mirada al ver las cartas parecian indiferente, irradiaba una actitud desinteresada, obviamente no le importaba el dinero.
Gabriela no lo miro mas, retiro la vista y se dio cuenta que Adrian ya se habia ido
Adrian tenia una sonrisa en su rostro, era muy cortes: “Falta gente en esta mesa?”
Se acercó un poco a Gabriela y le tiro la silla el mismo Penny y yo justo tenemos tiempo, juguemos juntos, Sr. Sagel, no te importa, ¿verdad?”
Al escuchar esa voz. Sebastian levantó la cabeza y lo miro.
Adrian tambien era parte de ese circulo, aparte de su afición por jugar con las mujeres y un poco de arrogancia, usualmente era bastante popular
Sebastian no dijo nada. Fabio hablo primero
“Que raro que te animes, pues vamos a divertimos”
Fabio tenia una apariencia más bien delicada y suave, con un lunar en la punta de la nariz Su mirada cayó sobre Gabriela, sus ojos estrechos se entrecerraron ligeramente “¿Estas cambiando de gustos?”
Gabriela salió de casa de prisa, se puso un vestido largo de seda bordado y se apuro a llegar aqui. Su cara sin maquillaje ni siquiera tenia lapiz labial, pero en comparación con todas las mujeres del lugar con maquillaje pesado, su figura y temperamento eran inigualablemente superiores
Desde que entro, los hombres presentes no pudieron evitar robarle miradas.
Ese tipo de belleza fria y distante era raro en ese circulo