”
Capítulo 87
Adnan la mird, “No pasó nada grave con la abuela, ya Pablo la llevó a casa.”
Esther asintió con alivio, “Bien, mientras la abuela esté bien. Tengo que irme, adiós.”
Dicho esto, continuo caminando, dio unos pasos y luego se detuvo. Se giró y preguntó con confusión, ¿Por qué sigues caminando conmigo?”
Adnan arqueó una ceja, “No dijiste que me ibas a invitar a comer?”
Esther sonrió con amargura, “Dije que iba a invitar a abuela a comer, y te invité de paso. Ahora que la abuela no puede venir, nuestra cena también se canceló.”
Adnan frunció el ceño, riendo friamente, “Entonces yo te invito, aún puedes comer, ¿no?”
Esther no estaba interesada, hizo un gesto con la mano y dijo, “Vete a comer solo, tengo otros planes.”
Adrián entrecerró los ojos y preguntó, “¿Que planes tienes?”
Esther frunció el ceño, molesta, “¿Necesito decirtelo?”
Adnan la miró friamente, “¿Qué crees?”
¡Este hombre tiene demasiado control, es insoportable! Menos mal que sólo tienen una relación matrimonial temporal, quién podria soportarlo a largo plazo!
Esther dijo con resignación. “Hoy es mi graduación, mis compañeros de clase planean una cena, podria quedarme hasta tarde.”
Explicó muy claramente, con una actitud muy abierta, pero no estaba buscando su aprobación.
Adrián encendió un cigarrillo, “Compañeros de universidad, después de graduarse básicamente no tendrán mucho contacto, realmente necesitas ir a esa reunión?” Esther lo miraba fijamente “Quiero in! ¿Acaso las reuniones siempre tienen que tener un propósito? Todos estaran ocupados con sus vidas después de la graduación, puede que no tengamos otra oportunidad asi, quiero despedirme de ellos”
Adrian se quedó callado por un momento, “Sube al coche, te llevo.
Esther nego con la cabeza, “No hace falta, puedo llamar un taxi.”
Antes de que pudiera terminar de hablar, Adrián la subió al coche.
Esther pensó que Adrián era un hombre extraño, siempre daba la impresión de ser superior, pero siempre se entrometia en los asuntos de los demás.
El destino era el Club Delirio.
“Gracias” Dicho esto, Esther bajó del coche y entró sola al Club Delirio.
El coche de Adrián no se fue directamente, sino que se quedó esperando El conductor se giró y preguntó, “Sr. Gómez, ¿volvemos a casa o vamos a otro lugar?” Adnan no respondió, el conductor no se atrevió a preguntar más. Los ojos de Adrián estaban fijos en la entrada del Club Delirio
En ese momento, Gerald llamó
“Adri, ¿dónde estas? ¿Quieres ir al Bar Atardecer a tomar una copa esta noche?”
“Cambia de lugar
“De acuerdo, ¿dónde quieres ir?”
“Club Delirio”
“¿Qué? ¿Qué dijiste?”
La frase de Gerald se detuvo por unos segundos, parecia dudar de si había oido mal.
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