Capítulo 838
Patricia ya se había tranquilizado, volvió a defender a su madre: “¡Leo, no puedes sospechar de mamá así! El azafrán es reconocido por todos como algo bueno para la circulación y la belleza, imamá no sabe de medicina, sólo sabe que las cosas buenas se deben usar mucho! De todas formas, mamá añadió azafrán al jugo de granada con buena intención, realmente no tenia malos propósitos!”
¿Buenas intenciones? ¡Sus buenas intenciones casi hacen que Esther se beba algo que podria dañar su cuerpo y su bebé! Además, hicieron que Brayan terminara en cama de hospital!
Leonardo miró a Patricia, quien siempre buscaba excusas para Adriana, y sintió un rechazo hacia su hermana, a quien siempre habia consentido…
En ese momento, alguien tocó la puerta de la habitación.
Era el doctor que había dejado el informe de los exámenes y luego se habia ido, pero ahora había regresado.
“Ah, me olvide de devolver algo a la Srta. Ibarra!”
El doctor se dirigió directamente hacia Patricia, sacó una tarjeta de banco de su bolsillo y se la entregó a Patricia, diciendo seriamente:
“Lo siento, Srta. Ibarra. En nuestro hospital tenemos reglas, no podemos aceptar propiedades de los familiares a escondidas, ni podemos alterar los resultados de los exámenes. Acepté temporalmente tu tarjeta para evitar que interrumpieras mi trabajo, pero ahora que he terminado el informe, puedo devolverte la tarjeta”
Al ver al doctor, Patricia se puso pálida.
No extendió la mano para tomar la tarjeta que el doctor le ofrecía, ¡no podia tomarla!
Si lo hacía, su imagen de inocencia que habia mantenido durante años se desmoronaría por completo.
Pero, en ese momento, no podía pensar en ninguna excusa para defenderse.
Leonardo tomó la tarjeta del doctor, confirmó que realmente era de Patricia, con su nombre impreso en ella.
De repente, Leonardo se llenó de decepción y enojo, y mirando a Patricia, pálida como un fantasma, exclamo, “Intentaste sobornar al doctor con dinero?!”
Patricia volvió en si, nego con la cabeza rápidamente y con nerviosismo, “No, no es asi. Leo, yo sólo queria que el doctor tratara la condición de Brayan con más cuidado, que le diera el mejor tratamiento… Como hermana de Brayan, estaba tan preocupada por él que le di dinero al doctor…”
Viendo que ella seguia mintiendo, la decepción que Leonardo sentia por su hermana se convirtió en desprecio, y con un resoplido dijo, “Deberías haberle dado dinero al medico principal de Brayan, no al que examinó el jugo de granada!”
Al ser descubierta por Leonardo, Patricia se quedó sin palabras, “Leo, yo…
Leonardo tiro la tarjeta de banco al suelo con fuerza, estaba lleno de decepción!
Al principio, penso que el jugo de granada era cosa de Adriana, que era una acción peligrosa que ella habia tomado para que su hija compitiera por Adrian, y que Pati no sabia nada, que sólo estaba protegiendo a su madre, que el asunto no tenia nada que ver con Pati.
Sin embargo, esta tarjeta de banco era suficiente para probar que Pati no sólo sabia sobre esto, sino que también lo apoyaba.
¡Así era su hermana a la que siempre habia mimado desde pequeño Resultó que ella era tan calculadora y tan buena fingiendo inocencia.
Patricia se dio cuenta de que había decepcionado a Leonardo, y de inmediato intentó abrazarlo como solia hacer, fingiendo ser miserable, “Leo, realmente me malinterpretaste, las cosas no son como imaginas”
Leonardo sintió aversión y la empujó, “¿Aún no admites tus errores con la situación actual? ¡Ja! ¡No tengo razones para creerte!”