Capitulo 502
Capítulo 502
“¡Esther, sabia que eras tú!”
Al ver el hermoso rostro de Pedro Cevedo, Esther se sorprendió por un momento y luego suspiró aliviada: “¡Así que eres tú!“.
Pedro sonrió, “¿Qué pasa? ¿A quién creias que era?*
“No es nada, es solo que me sorprendiste con tu repentina aparición“.
¿Qué estaba temiendo? ¿Creia que Adrián volvería a buscarla?
¡Se está preocupando demasiado!
Pedro camino hacia ella con elegancia, “Esther, recuerdas la ultima vez que nos vimos? Ese día te pregunté cuándo nos podiamos ver de nuevo, y dijiste que depende del destino. Hoy nos encontramos aquí, ¿no significa eso que tenemos un cierto destino?”
Esther se rio friamente, “Si, es bastante coincidencia”
Pedro fingió estar descontento y frunció la ceja, “¡Estás siendo muy evasiva! No te alegras de verme?”
Esther bostezo. “Deberia estar contenta“”
Pedro suspiro y de repente se acercó a ella, “¡Pero me siento muy feliz de verte!”
Esther no mostró expresión. “Oh, en serio?”
Los ojos llenos de cariño de Pedro la miraron durante medio minuto, pero no lograron conmoverla
Obviamente estaba un poco frustrado, pero aun asi sonrió. “Esther, cuando te vi antes, estabas vestida de manera informal. Esta es la primera vez que te vi vestida asi. Eres muy hermosa“.
“Gracias”
Esther bajo al primer piso y miraba alrededor, ya no había ningún lugar tranquilo en el salón, cada sofá o zona de recepción estaba ocupado por gente charlando.
No queria ir a esos lugares a interrumpir las conversaciones de la gente, o convertirse en tema de conversación.
Mientras baja las escaleras, Pedro la ha estado siguiendo con cara relajada, preguntándose si tiene algo que hacer.
Esther se volvió hacia él y le preguntó, “Pedro, ¿has visto a Leonardo?”
Pedro arqueó una ceja, “¿Por qué, necesitas algo de Leo?”
“No es nada, el es mi jefe ahora, yo soy su secretaria, vine con el hoy.”
Pedro estaba obviamente sorprendido, “Esther, ¿cuándo te convertiste en la secretaria de Leo?”
“Hace un par de dias”
“¿Por el cuadro de Lady Lotus?” Pedro la observaba.
Pedro le contó sobre la relación entre Lady Lotus y Leonardo, por lo que Esther no tenia la intención de ocultar el propósito de Pedro, y en realidad
no podia ocultarlo.
“¡Exacto! En cuanto a esto, espero que no hables de más delante del Sr. Ibarra.”
“Por supuesto que no lo haré.” Pedro sonrió.
“Gracias, ¡Pedro!”
“¡Llámame Pedro!”
Esther lo pensó y decidió complacerie, en agradecimiento por la información precisa que le había proporcionado, “¡Está bien! Gracias, Pedro”