Capítulo 1
“Escapar? ¿Tú, maldito! ¿Crees que puedes escapar ahora? Quiero ver cómo te las arreglas para huir de esto!”
Una voz desagradable resonaba en sus oidos.
No, no puede ser, no puede ser
¿Acaso no logró escapar? Ya intentó suicidarse, ¿por qué aún no puede liberarse?
Un dolor inmenso atravesó su corazón, y en el siguiente instante, abrió los ojos de golpe.
Sus ojos estaban rojos, mirando fijamente al hombre frente a ella.
No tuvo tiempo para pensar demasiado, Lea Rubin agamó un pesado cenicero que tenia a su lado y lo estrelló contra la cabeza del hombre
“Maldita mujer¿Te atreves a desafiarme” Tu prometido ya te vendió a mi, esta noche no tienes a dónde ir
¿Prometido? ¿Fabian Quesada”
Espera, algo no cuadra no intento proteger su propia inocencia y poner fin a su vida en esa fábrica de transmisión llena de máquinas, escenografia y cámaras” ¿Este es una habitacion de hotel?
Lea se sorprendió de nuevo, este hombre no era un empleado del mercado negro, jera el director de cine Matias Suárez!
Sus recuerdos volvieron rápidamente.
Todo esto ocurrió hace cinco años.
En ese momento, acababa de ingresar al mundo del espectáculo y, debido a su negativa a aceptar reglas injustas, habia ofendido a un influyente productor que habia inventado muchas mentiras sobre ella, lo que la llevó a ser objeto de ataques en linea. Su estado emocional estaba en su punto más bajo, y Fabian la llamó para consolarla y la invitó al set de su sene de televisión
Pero esa noche, el director de la serie irrumpió en su habitación de hotel e intento violarta. Cuando se resistió sin éxito y empezó a sentirse mal, la alarma de incendios del hotel sono repentinamente, y Matias, pensando que era un incendio, huyo precipitadamente
Debido a la enemistad con Matias por haber sido difamada, Lea no pudo seguir en la industria del entretenimiento y los ataques en linea en su contra se volvieron cada vez mas intensos Una vez, mientras salia, estuvo a punto de ser atacada con ácido por un fanático enloquecido.
Pero todo eso ya era pasado, ¿por que Matias estaba ahora frente a ella?
No tenia tiempo para pensar mas. Agarró el cenicero y, con todas sus fuerzas, lo estrelló contra la cabeza de Matias.
Matias se vio obligado a retroceder, todavia maldiciendo.
“¿Cómo puedes tener tanta fuerza, Fabian no te drogo? ¿Sabes quién soy yo?”
Lea vio un cuchillo de frutas en la mesa de café y corrió hacia él, lo tomó y lo apuñaló en el hombro de Matias.
“Eres un animal”
Un grito agudo resonó en la habitación.
Lea se sentia cada vez más debil y apenas podia levantarse
Se mordió la lengua con fuerza y miró con determinación, tratando de despertar su conciencia a traves del dolor.
Despues de ser apuñalado, Matias mostró una mirada feroz y siniestra en su rostro.
Lea apreto los dientes y apuñalo nuevamente a Matias con el cuchillo de frutas.
Cambio de posición y el cuchillo de frutas se clavó directamente en el muslo de Matias.
“Ahhhhhhhhhh
El cuchillo lo habia hendo peligrosamente cerca de sus partes intimas
La cara de Matias se volvio pálida de inmediato
Soltó a Lea y retrocedió vanos pasos antes de caer al suelo en agonia
‘No
ΠΟ no te acerques!” El rostro de Matias estaba lleno de miedo. Su herida en el musio estaba sangrando.
Lea sostenia el cuchillo manchado de sangre, pero su cuerpo habia alcanzado su limite. Se tambaled y cayo al suelo.
Matias la miró en su estado, comprendiendo que los efectos de la droga estaban comenzando a hacer efecto, pero el también estaba lleno de sangre y no podia hacer mucho más Solo dejo una amenaza antes de cubrir su henda y huir apresuradamente
La puerta de la habitación se abrió, afuera estaba la alfombra roja en el pasillo
La vista de Lea ya estaba borrosa, pero sabia que no podia desmayarse aqui
Si Matias regresaba a la habitación, ya no tendra ninguna posibilidad de sobrevivir
Reunió todas sus fuerzas y, tambaleándose, salió
Cuando llegó a la puerta, vio que alguien salia de la habitación de al lado
No podia ver quién era esa persona, solo vela una sombra borosa y negra. Sostenia con fuerza un cuchillo pam frutas manchado de sangre, y de repente se desploma frente a el
El hombre parecia haberse asustado y, por instinto, atrapó su cuerpo
Lea agarró el cuello de la chaqueta del hombre, acercandose mucho, luego sacudió la cabeza con fuerza, tatando
ver su rostro. No era Fabian.
Esa fue la ultima conciencia de Lea
Estaba bien siempre que no fuera Fabian
Confiada, apoyó la cabeza en el sólido pecho del hombre y dijo en voz baja: “Por favor ayuda… llama a una ambulancia…
Después de decir eso, se desmayó por completo.
“Isaac Oviedo, jespera un momento! Esa realidad televisiva fue realmente interesante, y de todos modos, tienes tiempo libre últimamente, así que ven y juega conmigo Dios mio!” El agente José Pérez salió comendo de la habitación y vio a su estrella de cine parada en el pasillo, sosteniendo a una chica con los ojos cerrados y el cuello de su camisa abierta.