Capitulo 371
La sala de vigilancia estaba excepcionalmente tranquila
Cuando la enfermera levé a Natalia a la habitación de Gerardo, empujó la puerta y dijo: “Solo puedes quedarte media hora entra
Natalia le agradeció, respirò profundamente, reunió todo su valor y abrió esa puerta,
La puerta se abro
Gerardo estaba semi recostado en la cama con un libro en la mano, hojeando las páginas lentamente
Llevaba una gran bata de paciente que le hacia parecer aún más delgado.
Su rostre estaba paldo, los labios apretados, sus ojos profundos, pero ya no tenan la ternura de antes
La mirada de Natalia recorrió desde la cabeza hasta los pies, llegando a la cama plana.
Había escuchado al medico decir que le habian amputado ambas piernas
Le brotaronligimas en los ojos y el valor que habi reunido se desmorond de inmediato.
“Naty, por que estás aqui?”
Gerardo escucho pasos, pensó que eran sus padres, pero resulto ser Natalia
Intentó sentarse, cerro el libro que tenia en la mano y dẹo: “¿Por qué has adelgazado tanto? ¿No has estado comiendo bien?”
Alescuchar sus palabras, Natalia se sintió muy dolorida y las ligemas comenzaron a caer incontrolablemente.
Se acerco lentamente, cada paso era como pisar una navaja, el dolor era casi insoportable
Habla tardado varios minutos en llegar a la cama, y no podia contener las lágrimas.
“Gerardo, lo siento.”
Natalia comenzó a hablar con las lágrimas corriendo constantemente. Intento controlar sus emociones, pero no pudo
No podia enfrentar lo que le habia sucedido a Gerardo en esse momento, ni tampoco podia enfrentarse a ella misma, la causa de su estado.
Gerardo vio a Natalia llorar y se sintió algo desconcertado. Tomo un pañuelo de la mesita de noche y le seco las lágrimas. No lores. Estoy bien, solo necesito un tiempo para adaptarme
Pro Natalia comenzo a llorar aún mus. Gerardo intento consolarla, pero fue en vano. Finalmente se rindió, espero hasta que dejó de llorar y luego dijo Suavemente “Fui yo quien perdi las piernas, no tú. Nolores”
Los ojos de Natalia estaban hinchados y rojos
“No te sientas culpable, in te preocupes demasiado Estaba dispuesto a ayudarte.” Gerardo no queria ponerle presión: “Naty tú mejor que nadie sabes que, incluso si hubiera sido un extrato ali, habría extendido una mano.”
Natalia tartamuded,
“Así que no te presiones demasiado.” Gerardo le seco las lágrimas de la cara: “Ahora eres madre, no puedes tener tantos cambios emocionales. Lentiendes?”
Las palabras de consuelo de Gerardo hicieron que Natalia se sintiera un pour. Preferiria que el estuviera enojado, is golpeara, la insultara, cualquier cos seria mejor que esto
Pero Gerardo siempre habia sido asi, nunca le ponia presión
El tiempo de visita era solo de media hora. Antes de irse, Natalia miró a Gerardo y dijo: “Gerardo recuerdo que en la universidad te gustaban los bocados de la puerta de la escuela, ¿quieres que mañana te traga algunos?”
Las palabras de Natalia significaban que volveria mañana
Gerardo la mard Necesitas descansar, no vengas mañana.”
Incluso si ella vera, él no la seria.
Intento parecer lo más natural posible, pero habla perdido las piernas. No queria presionaria, mucho menos queria que la familia Pacheco la amenazara
Natalia sonnd levemente y dijo ‘Gerardo, necesitas descansar bien“.
Después de que Natalia dejó la sala, Pablo Pacheco Inunció el ceño y dijo: “Natala, una vez le prometa cudado con tus acciones. Si haces algo que le perjudique, no te dejarė salir fácilmente!”
que no te molestaría, pero debes tener
“Intendostan con Gelado hasta que salga del hospital Ho una pausa “También estar con durante su periodo de recuperación, y aparte de eso, puedo dar a la familia Pacheco lo que quiero”
“Incluyendo casarte con
Pablo Pacheco soltó una fila carcajada
No le hacia lata dinero ni conexiones, ¿qué podria olecer Natalia a cambio?
Hptaka apretó sus puños: “S Pacheco, puedo hacer cualquier cosa, menos eso
Apreció a Gerardo, lo respeto, lo admiro, pero no lo quiero como esposo,
Quela retribuirle de muchas maneras, excepto casándose con él
Pablo Pacheco se burld Irlamente y no hablómk
11:35
Cuando Natalia saló del hospital, ya era tarde y comerad a nevar. En pocos minutos, estaba cubierta de nieve. Los copos de nieve calan en su cuello y se derretional instante. El frio se colaba en su ropa y Natala temblaba
No había avanzado mucho cuando un brillante auto deportivo rojo se detuvo Elisa Ramirez salió del auto con una actitud agresiva y le dio una bofetada A Natalia-
“Natala.¿por qué win no te has muerto?”
+
11:35
Elisa acababa de recibir la noticia y se regres volando