Capitulo 123
Ella pasó junto a Valeria, lista para se
“Hahaha”
Valeria la lamb, con una expresión un tamo distorsionada “Realmente conoces a Ricardo? ¿Estás segura de que quieres renunciar a cinco millones por
Vale la pena?”
Sabía que después de que Natalia fuera echada de la famla Tomes, debia necesitar mucho dinero.
Inclusos su estudio habia lanzado productos muy exitosos, cinco millones no eran una suma pequeñal
Nataliano entendia, por que Valeria se metia en su matrimonia
“Srta. Morales, en realidad no conozco a Ricardo, pero ati te conozco mucho menos. Si nuestro matrimonio continúa o no, depende de nosotros, no de
Natalia no queria perder mi tiempo, se dio la vuelta y se fue
Valeria se quedó en su lugar. No podía creer que Natalia renunciaria a una suma enorme de cinco mitones por un hombre que conocía desde hace menos de dos meses ¿Podria ser que no considerara que era suficiente?
¡Ya que no aceptaba el acuerdo, tendría que aceptar el castigo
Natalia volvió al restaurante. La comida ya estaba en la mesa
Su bistec había sido cortado en tros del tamaño de un bocado. Esto debía haber sido hecho por Ricardo.
Se sento, sonriendo dijo: “Gracas”
Ricardo la mind “Buin provecho”
Natalia queria pregumarle sobre Valeria, pero pensando que eta suprimera cita, decidió no decir nada
De camino a casa, Natalia miró a Ricardo, no pudo resistir más “Ricardo, ¿conoces a Valeria?”
Ricardo siquiera la miro. Supongo que si ¿Por qué?”
Natalia mordió su labio, no sabía como empezar. Después de un rato, nego con la cabeza: “Escuché a mi abuela mencionaria antes.”
Graciela efectivamente habia mencionado a Valeria durante una lamada No sabla que se habila dicha durante esa amada, pero Graciela parecia muy
*Nuestra familia estaba bastante bien antes” Ricardo, preocupado de que ella pensara demasiado, explico. Después de algunos contratiempos. perdimos el contacto durante mucho tiempo. La he visto un par de veces desde que regresó al pals
Asi que eso era
Natalia serció en el asiento del copiloto, con una expresión preocupada Entonces, todavia tienen deudar
era asi, supresión debla ser enorme.
Ricardo negó con la cabeza: “No. Aunque hemos tenido muchos contratiempos en los últimos años, no tenemos deudas”
Natalia suspiro waliviada, pero sintió que su pregunta era un poco ofensiva Rie, lo siento, no quise preguntar esas cosas. Solo que.”
Ricardo la interrumpid: “Realmente quiero intentar esto contigo. Si tienes alguna pregunta, puedes preguntarme directamente.”
Natalia sonrió, sinténdose aliviada: “Está bien.”
Cuando volvieron al apartamento, Natalia salió del baño y encontró que Ricardo, a diferencia de sa costumbre, estaba sentado en la sala de estar, evidentemente esperandola
Recordando lo que habla pasado la noche anterior, sus mejillas se pusieron un poco mjas.
Fecardo la via sale y la lamed Man
Natalia se acercó. El se levanto, cogió el secador de pelo: “Te secaré el pelo.”
Natalis se sentó en el sofá, un poco fimida.
Ricardo conectó la electricidad, encendió el aire caliente, y se paid detra de ella, sus dedos pasando por su largo cabello.
Su cabellera hermoso, grueso y brillante, tocandolo se sentia como Incar seda, era dificil soltarlo
Elaire caliente soplatia suavemente en el cuello de Natalia, haciéndola temblar un poco.
Ella era muy sensible, sus meylas y cuello se hablan puesta injas.
Ricardo not surección Extendió una mano para masajero cuero cabellado, sus movimientos eramy hábiles.
Natalia disfruté un momento, pero parecia un poco insatisfecha Acaso fulla hecho esta muchas veces con otras mujeres?
Ricardo era tres años mayor que ella Un hombre de 28 años que habla estudiado en el extranjero, ¿cómo podia no haber tenido novia?
Sabla que todo eso era cosa del pasado, pero aun así se ponla calda
Ricole secol cabello, quando el secador y solo entonces not la mirada un poco molesta de Natala
“¿Qué pasó?” pregunto ¿La habla lastimado de alguna manera?
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¿Siempre haces esto? Natalia preguntó en voz baja, un tono de celos se deslizaba en su voz.
La idea de que otras también hablan disfrutado de su ternura le dejaba un sabor un poco amargo en el corazón