Capitulo 21
desde hace tiempo que él era muy buen cocinero, incluso un
Patricia hizo algunas marcas en el con la mano, al observar de cerca, se podia ver que decian
ntimientos en ese momento eran complicados, no se arrepentia, pero aún estaba un poco
insegura y sofocada Estaba enojada consigo misma por casarse con un hombre al que acababa de conocer sin estar preparada para
mejillas con frustración y forzó una sonrisa que parecia peor que llorar Agradeció que
manga larga y pantalones largos, asi no parecera fuera de lugar ni forzado
Pascual ya se habia duchado y estaba casi sentado en la cama hojeando un libro Su cabello corto
que aun no estaba completamente seco, el cuello de su pijama estaba muy abierto, mostrando una gran parte de su pecho bronceado Junto con sus rasgos bien esculpidos, Patricia se sonrojó involuntariamente al verlo en tal escena En su menona, este tipo de escenas solo aparecian en la television, novelas, peliculas, nunca las había visto en la vida real
Al notar que siguen estaba parado en la puerta, Pascual levantó la cabeza y dejó el libro en la mesita de noche. Estaba un poco sordido de que ella se hubiera duchado tan rápido, ya estaba preparado para esperar una hora, pero sólo le tomó media hora, lo
amente hacia el Pascual le pidió que se sentara de espaldas Patricia no entendia por qué, temente. De repente sintió el cuerpo caliente del hombre en su espalda y su mano acariciando su cabello. Se
por instinto, pero el la sujeto por los hombros, inmovilizándola
vaba pijama. Patricia ntia com si la piel de su espalda fuera a quemarse con su tacto
razón de Patriciat
mblaba, pero no sabia cuan tentadora era su voz tema para un hombre maduro.
ascual se tenso y le tro suavemente de la oreja: “En inviemo, es mejor secarse el cabello largo, de lo contrario, es fácil enfermarse
uperficial ni casual, y no tenia nada que ver con los rufianes, pero no esperaba que simplemente ayudar a
se gons deraba senc
SU ESPOSA
secarse
asustara tanto.
Mientras escuchaba el ruido del secador de pelo, Patricia se dio cuenta de que él queria secarle el cabello. Su cuerpo que estaba tenso se relajo un poco recordando la escena de la tarde en el supermercado, una ligera sonnsa se dibujo en su rostro.
Todas esas cosas fueron compradas en el supermercado por la tarde. El vendedor fue muy atento y les presentó amablemente articulos como rodilleras, orjeras, gorros, bufandas, zapatos electricos, calentadores de manos, bolsas de agua caliente y otros objetos pequeños que nunca habia visto antes.
Penso que el no seria tan obediente, pero para su sorpresa, el realmente compro todo y lo puso en el carrito de compras. El vendedor se no con alegria, mientras Patricia se paro a un lado y sonno con rigidez. Estas eran cosas que a las chicas jóvenes les gustaban, y una mujer de casi treinta años usando estos objetos seguramente seria objeto de burla Además, cuando estaba ocupada trabajando,
siquiera tenia tiempo para beber agua, ¿cómo podria tener tiempo para lidiar con estos articulos?
