Capítulo 394
Al corazón de Rosa le entrò un miedo repentino, y su cuerpo se desplomó de inmediato por el susto, se sentó en el suelo y todo lo que tenia en las manos se esparció a su alrededor parecia bastante avergonzada
Selena se levanto lentamente mirandola desde amba
“No me cuestiones Rosa al menos por ahora, la inversión de los Acosta, ya no la puede obtener Cedrés Business.”
Selena dijo solo esas frias palabras y luego se dio la vuelta para irse con Petrona
Pero tan pronto como se alejaron un poco, un coche negro se detuvo frente a ellas.
Cuando bajaron la ventana del coche, el hombre que estaba dentro era David.
“Sube al coche”
Selena se sorprendió por su apanción, pero obedeció e hizo lo que le pidió
“¿Como es que estás aquí?”
“¿Como no voy a preocuparme si tú no estás?” La cara de David parecia un poco seria. Solo se había ido unas pocas horas y cuando volvió a la habitación, ella ya no estaba.
Petrona que estaba a su lado se no, “Realmente estás asustado de que alguien secuestre a Selena?”
David no respondió, solo la miro friamente.
La sonnsa de Petrona se congelo, parecia un poco incómoda, “Realmente temes que la secuestren?”
Se quedo en silencio durante un rato, luego no pudo evitar reir
Ella le dio un codazo a Selena, nendo hasta que le salieron lágrimas
“Selena, eres increible, mira a David, parece que quiere llevarte siempre con él. ¿Qué le has hecho a nuestro jefe?”
Selena sonno y rápidamente bajo la cabeza para abrocharse el cinturón.
“Si vuelvo a oir tu risa, te hago bajar del coche.”
La voz fria de David estaba llena de advertencias, su rostro también parecia muy sombrio, Petrona inmediatamente dejó de reir.
Selena, sentada a su lado, lo miro de reojo, parecia que no pasaba nada.
Selena frunció los labios, parecía un poco confundida
Petrona hizo un mohin y miró por el espejo retrovisor, vio a Rosa aún sentada en el suelo y su sonrisa se desvaneció lentamente.
“Selena, cuando llegaste al centro comercial te dirigiste directamente a la zona de lujo, ¿ya sabias que Rosa y la Sra. Acosta estarian aqui?”
Selena también miró a Rosa y luego reliró su mirada con arrogancia.
“Esta acostumbrada a que la adulen, y ahora necesita adular a otros, así que naturalmente hace lo que le gusta. Lamentablemente, la Sra Acosta no es de su misma clase.”
Petrona asintió, “,Claro! La Sra. Acosta, como la esposa del CEO de un gran conglomerado, ¿qué no tiene? Rosa realmente se esfuerza, se levanta temprano para mimar a la Sra. Acosta, pero al final todo su esfuerzo es en vano…”
Selena parecia indiferente, “La Sra. Acosta es la verdadera protagonista de este lugar, Capital Horgués. En su propio territorio, ¿como podria soportar que alguien externo amenace su posición? Rosa siempre ha amado mostrar, hace cosas groseras una y otra vez, naturalmente no será del agrado de todos.”
Petrona se no friamente, “Lo más importante es que ella misma es una mala persona! El tiempo revelará la verdad, Héctor se dará cuenta de lo equivocado que estuvo al decidir salir con ella.*
Selena miró por la ventana del coche y dijo con indiferencia:
“Lo que sobra en este mundo son hombres como Héctor.”