sin pestañear.
Capítulo 264
En el auto, Selena respiró profundamente, se volvió hacia David y dijo:
¿Me acompañarías a un lugar? Todavia es temprano.”
“Claro.”
Hogar de la Esperanza.
Justo cuando el auto se detuvo, David miró a través de la ventana.
“¿Has estado financiando este lugar todo este tiempo?”
Selena pregunto sorprendida, “¿Has estado investigandome?”
David la miró de reojo, “La última vez que ganaste dinero en el centro comercial, lo primero que hiciste fue venir aquí”
¿Así que era eso?
Selena se sintió algo incómoda y se lamió los labios.
“Eh… Este es el lugar donde creció mi mamá. Sin apoyo, es dificil mantener un lugar como este, y no quiero verlo desaparecer ante mis ojos.” Selena sonrió hacia él y abrió la puerta del auto.
Vamos a echar un vistazo, te presentaré a un amiguito.”
¿Ah si?” David levantó una ceja, tomó su brazo y la atrajo hacia él.
Su rostro apuesto se acercó abruptamente al de ella, mirándola con ojos tiernos, “¿Te gustan los niños? No me importa trabajar duro.”
Selena se estremeció, “¿Ya estás pensando en eso y aún no estamos casados?”
“¿Por qué no?”
“No, no está bien.”
¿Entonces cuándo te casarás conmigo?”
Selena desvió la mirada, claramente incómoda.
¡Eso requiere tiempo!”
David se detuvo por un momento, mirando a la mujer tan cerca de él, y le dio un beso en los labios.
“Eres tan dificil.”
“¡Ay! Clara, están besándose …”
*Sí, yo también lo vi. Escuché que si te besas, tendrás un bebé lindo, ¡van a tener un bebé!”
La puerta del auto de Selena ya estaba abierta, y en ese momento, dos niños pequeños de cuatro o cinco años se asomaban por la puerta, mirándolos con ojos brillantes e inocentes.
Selena se sonrojó.
Dejaron que los niños los vieran…
¡Qué vergüenza!
David solo se rio, y le susurró al oído:
“Si solo besarse pudiera tener hijos, sería una mala noticia para los hombres.”
Selena lo miró sin palabras, y salió del auto.
Justo en ese momento, una maestra joven que probablemente había notado la ausencia de los niños, corrió apresuradamente. Al ver a Selena con los niños, suspiró aliviada.
“Señorita Selena, ¿ha venido?”
“Si.”
David se bajó del auto por el otro lado en ese momento, su figura alta y esbelta atrajo inmediatamente la atención de la joven maestra.
Cuando él se dio la vuelta, los ojos de la maestra se abrieron de par en par.
“Wow, él es tan guapo!“, la niña en el brazo de Selena gritó dulcemente.
Luego soltó la mano de Selena y corrió hacia David.
La pequeña figura tierna se tambaleaba al correr, como si fuera a caer en cualquier momento.
David miró a la niña que de repente se abrazó a su rodilla, frunció el ceño ligeramente, y miró hacia abajo a la niña que lo miraba.
“Señor, Sarina quiere casarse contigo… ¿Te casarías con Sarina?”
David frunció el ceño, su voz era algo fría:
“No.”
La niña llamada Sarina inmediatamente puso un puchero, lágrimas brillantes aparecieron en sus grandes ojos.
“¿Por qué? ¿No es linda Sarina?”
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Capítulo 264
David asintió, señaló a Selena y dijo seriamente:
“No eres tan linda como ella.