Capítulo 48
Cuando Evelyn llegó al hospital, preguntó un poco y encontró la habitación de Aurora, se acercó, no sabía por qué, pero en ese momento se sentia especialmente tranquila. Tampoco estaba segura de por qué había venido. La puerta de la habitación estaba abierta, y se olan llantos desgarradores desde dentro.
Evelyn se quedó en la puerta, vio a Aurora y César, y a la gente de la familia Alarcón. Todos se sorprendieron al ver a Evelyn.
Pero Aurora agarró una almohada y la lanzó hacia la puerta: “Evelyn, eres criminal! ¡Asesinaste a mi hijo! ¡Eres una bestia! ¿Por qué asesinaste a nuestro hijo?“.
La voz de Aurora era ronca, incluso intentó saltar de la cama y abalanzarse sobre ella, pero terminó cayendo al suelo.
Sarah dio un paso adelante y dijo: “Calmate un poco. Mira en qué estado estás, calmate“. Ella era la mamá de César.
A Sarah nunca le habia gustado Aurora, cuando se enteró de que esa chica estaba embarazada, se enfureció tanto que casi se desmaya, pero después de todo, también era el hijo de César, su nieto.
Pero el niño no se había salvado y al ver a Aurora en esta condición, solo sentia pena.
La enfermera se apresuro a ayudar a Aurora a subir a la cama y Evelyn entró con calma.
Mauricio Alarcón, el padre de César, suspiro: “Evelyn, ¿cómo pudiste hacer eso? Sé que César te hizo daño pero, de todos modos, era una nueva vida dentro de nuestra familia. Realmente nos duele“.
Evelyn respondió tranquilamente: “Yo no la empuje“.
Aurora escuchó sus palabras y gritó “Evelyn, ¿todavía quieres negarlo? ¿Estás diciendo que me cai a propósito para inculparte? Césario vio con sus propios ojos, eres una desvergonzada“.
Evelyn realmente admiraba la fortaleza interior de Aurora. Si, ella se cayó a propósito para inculparla, pero nadie lo creía, después de todo, estaba apostando por una vida, incluso su propia vida.
Pero Evelyn dijo: “La verdad es clara en tu corazón Aurora. No admitiré algo que no hice“.
Aurora lloraba a mares “Evelyn, sé que me odias, pero no podías hacer esto. Me empujaste por las escaleras, me hiciste perder a mi hijo, cometiste estos malos actos y no los admites, incluso me incriminas y me culpas”
Aurora sacó una grabadora de debajo de la almohada y dijo: “Soy periodista, acostumbro llevar una grabadora a todo lado. Esta grabación fue accidental. Escuchen y verán que la Evelyn que creen conocer no es tan inocente y bondadosa como todos creen. Todos han sido engañados por su aparente bondad”
Aurora presionó el botón de reproducción de la grabadora.
La voz de Aurora sono en la grabadora: “Evelyn, lo siento por lo de César, no quiero perderte como amiga. ¿Puedes perdonarme una vez, solo una vez, podemos volver a ser como antes?“.
Luego fue el turno de Evelyn: “Si quieres que te perdone, entonces aborta al hijo que tienes con César, luego rompe con César. Podemos ser como antes, igual de buenas amigas, ¿qué te parece?“.
Esa grabación se reprodujo varias veces antes de que Aurora la apagara, ya estaba llorando a mares: “Evelyn, solo me enamoré de César, ¿qué hice mal? Siempre te consideré mi mejor amiga, ¿pero por qué me hiciste esto, por qué mataste a mi hijo?“.