cuidado…
Capítulo 234
Quizás fue por la luz tan tenue.
O quizás fue por la hermosura de la noche.
Evelyn, al final, no pudo resistir la tentación.
Sus cuerpos estaban pegados uno contra el otro debajo de las sábanas.
A pesar de estar en el punto máximo de la pasión, Evelyn mantenia un poco de cordura, “La ropa aún no se ha secado“.
Renzo la apretó contra la pared del baño, la abrazó fuerte por la cintura, cambió de posición, y le dio un beso apasionado.
Cuando sus labios estaban entrelazados, él murmuró de forma incoherente, “No importa…”
Cuando Evelyn despertó en la mañana, sentía algo que le hacia cosquillas en la cara, como una pluma.
Se frotó los ojos con la mano
Al abrir los ojos, la primera cosa que vio fue un rostro tan guapo que le acelero el corazón.
Renzo ya estaba despierto, sus dedos aún acariciaban suavemente sus cejas y ojos.
Evelyn frunció el ceño, ¿Qué estás haciendo?”
Renzo con su voz ronca de la mañana y una misteriosa atracción, respondió, “Nada, sólo queria mirarte.”
Con esas simples palabras, hizo que el rostro de Evelyn se enrojeciera.
Evelyn evito la mirada de Renzo, sus ojos parecian brillar con una luz intensa.
Evelyn infló sus mejillas de manera inconsciente, “¿Qué tiene de especial mirarme?”
Renzo se acercó a Evelyn y la abrazó
No era algo del otro mundo, pero la mano de Evelyn tocó algo por accidente.
Fue entonces cuando se dio cuenta de que Renzo no llevaba nada de ropa.
No pudo evitar decir, “Eres un descarado, incluso para dormir no llevas ropa!”
“¿Eso te parece demasiado? Hay cosas aún más atrevidas, ¿quieres ver?”
Evelyn se rindió al instante, “No puedo, estoy muy cansada, tengo que ir a la escuela hoy.”
La noche anterior, ellos….
Renzo era como una bestia que había estado hambrienta durante siete dias.
Renzo sonrió con dulzura, “Entonces quédate quieta en mis brazos, no te muevas.
Pero Evelyn pareció recordar algo y empujó a Renzo, “Tu ropa…”
Se levanto y se fue al baño.
Renzo frunció el ceño.
Cuando Evelyn salió del baño, tenía una mirada de desaliento en su rostro.
Aun llevaba en sus manos la camisa que Renzo habia usado el día anterior.
No pudo dormir la noche anterior, así que decidió lavar la ropa de Renzo, para que tuviera algo que ponerse al día siguiente.
Pero en medio del proceso de secado, Renzo irrumpió en la habitación.
Y entonces…
En ese momento, la ropa fue dejada en el lavabo, y ahora estaba mojada y arrugada, imposible de usar
Evelyn se acercó y se quejó, “Todo es tu culpa, ¿ves cómo quedó la ropa?”
Renzo sonrió, “Está bien, toda la culpa es mia, pero es sólo una camisa, ¿por qué te importa tanto?”
“No me importa la ropa, me importa que vas a usar para salir hoy”
Justo cuando Evelyn terminaba de hablar.
-La puerta de la habitación sono
–
Evelyn se preguntó quién podría estar tocando la puerta tan temprano
Pero Renzo parecía entender, Ve a abrir, debe ser alguien que vino a solucionar tu problema”
Evelyn se acercó a la puerta con expresión de duda.
Para su sorpresa, en la puerta estaba Zander, el secretario de Renzo.
Zander llevaba varias prendas de vestir, y dijo: “Esto es lo que el Sr. Casal me pidió que te trajera.”
Evelyn se quedó un poco atónita: “Gracias.”
“No tienes que agradecerme, es mi trabajo, me tengo que ir.”
Evelyn entró de nuevo a la habitación: “Parece que ya lo tenías todo planeado, lo mandaste atraerte la ropa!”
Capitulo 234
Renzo ya estaba sentado: “Pero te agradezco que lavaras mi ropa anoche.”
Evelyn se acercó y le tiró la ropa encima: “Sólo me preocupaba que no tuvieras nada que ponerte, seria vergonzoso salir asi.”