Capítulo 227
Laura no esperaba para nada que Evelyn la contradeciria.
Evelyn siempre había sido una chica muy reservada, pero hoy su contradicción fue una sorpresa.
Laura sonrió incómoda y dijo: “¿Por qué me contradices de repente? Renzo es parte de nuestra familia, claro que si
Dario intervino: “Vamos a sentarnos todos a comer Evelyn, tú también siéntate”
Renzo solo observaba a Evelyn, como un espectador.
A la derecha de Renzo estaba el asiento del anfitrión, donde se sentaba Dario
Y Vivian se sentó sin reparos en el lugar de la izquierda.
Dario la regaño Vivian, ¿cómo puedes ser tan insensible? Evelyn deberia sentarse aqui
Vivian respondió: “Este ha sido mi lugar siempre, ya estoy acostumbrada a sentarme aqui.”
Evelyn no dijo nada y se sentó en el lugar más alejado de Renzo.
Tampoco miro a Renzo.
Porque Evelyn tampoco entendia.
Se había ido tan enfadado el día anterior, ¿por qué aparecía de repente hoy?
¿Que estaba haciendo aquí?
Laura cambió de tema: “Vamos a comer. Renzo, hice salmón al horno especialmente para ti. Evelyn anteriormente me dijo que es tu plato favorito”
Renzo respondió friamente: “Gracias, Laura.”
Laura se sintió incómoda al escucharlo llamarla por su nombre
El llamaba a Dario papá, pero a ella la llamaba Laura.
Evelyn nunca la llamaba mama, por eso el tampoco lo hacia.
Evelyn solo comia en silencio, sin prestar atención a nada más.
Durante la cena, Renzo habló todo el tiempo con Dario sobre acciones, financiamiento, precios de propiedades.
Vivian también intervenia constantemente, pero sus comentarios eran a menudo absurdos.
Laura habia preparado un plato de langosta al horno.
Este tipo de langosta tiene una cáscara dura y espinosa, es dificil de pelar, pero es el plato favorito de Vivian.
Se pinchó la mano mientras pelaba la langosta, incluso sangró.
Vivian le mostró su dedo a Renzo: “Mira, me pinché el dedo.”
Renzo respondió friamente: “Ponte una curita.”
Vivian sonrio: “Gracias por preocuparte.”
Luego Renzo comenzó a pelar la langosta.
Mientras hablaba con Dario, parecía pelar la langosta sin ningún contratiempo
Vivian pensaba que Renzo pelaba la langosta con mucha elegancia. Sus dedos largos, movimientos tranquilos, le daban una sensación de fluidez indescriptible. Cuando terminó, colocó la langosta pelada en un plato nuevo, brillante y transparente, y los dedos de Renzo no tenían una gota de grasa.
Lo que más le gustaba a Vivian era que Renzo habia comenzado a pelar la langosta después de que ella se hubiera pinchado….
No pudo evitar albergar una expectativa.
Esta expectativa se fue intensificando.
Después de un rato, Renzo detuvo su mano y limpió sus dedos con una toalla humeda.
Luego levantó el plato de manera natural y se lo pasó a Vivian.
Era para ella, por supuesto.
Vivian estaba llena de alegria.
Estiró la mano para recibirlo.
“Gracias
Antes de que ella pudiera terminar, Renzo dijo indiferente. “Es para Evelyn.”
El rostro de Vivian se volvió pálido al instante.
Pero Renzo le devolvió una sonrisa educada: “Gracias”
Vivian logró esbozar una sonrisa: “Está bien.”
Luego se levantó y le llevó el plato a Evelyn.
Aunque trató de controlarse, dejó caer el plato delante de Evelyn con un golpe, y su voz no pude evitar ser sarcastica: “Evelyn, Renzo es tan atento, tienes mucha suerte de tenerlo.”
Vivan