Capitulo 686
Al llegar al tejado, mientras fruncia el ceño vio la puerta un poco entreabierta y el pomo de la puerta en el suelo
Pateo la puerta con el pie para abrirla, no habia nadie en la habitación.
Colocó a Gabriela en el sofá, reviso todas las habitaciones, y cuando se aseguró de que no había nadie, fue a la puerta y recogió el pomo de esta que
estaba en el suelo
Obviamente, alguien lo habia forzado
Arrastró un zapatero y lo puso contra la puerta, luego se volvió hacia ella
Gabriela estaba sentada en el sofa, en algún momento habia perdido sus zapatos, mostrando un par de calcetines blancos
Durante su camino, los calcetines se habian ensuciado.
Se acerco, se sentó a su lado y le quitó los calcetines.
Parecia que todavia no se habia recuperado del miedo, los dedos de sus pies se contrajeron ligeramente y se retiraron un poco
Sebastian arrojó los calcetines a la papelera más cercana ¿Hay algun botiquin en la habitación?”
Gabriela asintio, señalando silenciosamente a un armario
Sacó el botiquin, colocó las medicinas necesarias en la mesa de café, revisó la fecha de caducidad una por una, cuando confirmó que todavia podian ser utilizadas, apreto un poco de unguento en su dedo.
Levanto su cabello con una mano y con la otra aplico el unguento en su mejilla hinchada.
El aroma familiar que de repente la invadió, dejó a Gabriela confundida.
Sus dedos se movian lentamente sobre su mejilla.
Sentia cosquillas Picaba y dolia.
Parecia que también había ralentizado su respiración, después de aplicar el unguento, recogió su cabello detrás de sus orejas.
Gabriela bajo la cabeza incomoda al escucharlo preguntar “¿Quien lo hizo?”
“Dan”
Acaba de enviarle esa grabación, no penso que se enfadaria tanto.
Definitivamente había sido una lección.
La mano de Sebastian se detuvo en el aire por un momento y fruncio ligeramente el ceño.
Pero no dijo nada, solo aparto su cabello, exponiendo su frente para tratar la herida
Era alto por naturaleza, y aquel movimiento la dejó aún más en su sombra
Esa sensación de opresión hizo temblar todas sus células
Sebastian levantó suavemente su barbilla con un dedo, para poder ver más claramente la herida en su frente
Al ver que cerraba los ojos y no se atrevia a mirarlo, incluso sus pestañas temblaban, sus dedos se quedaron un poco rigidos.
Habian tenido contacto intimo antes, pero en esa ocasión era diferente.
Su mirada cayó en sus labios ligeramente fruncidos
Sus labios eran hermosos, con una pequeña perla en el centro Cuando se sentia afligida, fruncia los labios, lo que la hacia verse un poco patetica.
Cada vez que pensaba en ella sufriendo, no podia controlar su ira.
La escena en el ascensor estaba profundamente grabada en su mente.
Su corazón habia sufrido un fuerte impacto emocional.
“Senior Sagel, ¿ya termino?” Gabriela todavia tenia los ojos cerrados, sostenida por su barbilla, solo podía levantar ligeramente la cabeza.
Desde ese ángulo, parecia que su rostro estaba iluminado por la luz, aunque en ese momento se vela un poco desaliñada, todavia estaba cautivado por ella
Su garganta se movio, pero no dijo nada
Aún tenia los dedos en su frente, por lo que podia sentir claramente que estaba sudando
Si seguia mirándola asi, se emocionaria de nuevo
¿Qué tenia aquella mujer que le atraía tanto?
“Ve a ducharte, estás muy sucia.”
La solto y se sentó a un lado.
Gabriela bajo la cabeza avergonzada, rápidamente fue al dormitorio a buscar un pijama y luego entró al baño
Capitulo 686
Sebastián escuchó el sonido del agua en el baño, pero sentia que su temperatura corporal estaba subiendo.
Sin embargo, recordó sacar su celular y llamar a Álvaro.
Ocupate de Dan, Dan de SliverFilm, no quiero que vuelva a aparecer.”
Álvaro estaba un poco sorprendido, porque la Corporación Sagel estaba actualmente colaborando con Dan. En ese momento estaban preparando un juion, si algo le pasaba a Dan, todo el esfuerzo que habían hecho para aquel guion seria en vano.
Pero no dijo nada, sabia que el jefe tenía sus razones para hacer eso.
El sonido del agua en el baño se detuvo, Gabriela salió vestida con su pijama.
Sebastián la vio envuelta en una nube de vapor y de repente se preguntó alguna vez la habia visto vestida de forma más sensual?
Pero no podia recordarlo.
Desvio la mirada y dijo. Tienes una toalla?”
Gabriela señaló el baño y asintió.
Sebastian entró en el baño sin más.
Cuando salio, vio a Gabriela sentada en el sofa, comportandose como una buena chica.
Mientras se secaba el pelo, se sento y le preguntó “¿Te asuste?”
Rara vez la vela asi, tan tranquila y obediente, como si hubiera perdido el alma
En un instante, sintió que Dan era un verdadero hijo de puta.
No entendia del todo lo que estaba pasando, pero en ese momento deseaba poder solucionar el problema con sus propias manos.
No podia soportar verla asi!
Y eso tambien lo llenaba de rabia.
2/2