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Capítulo 393
Gabriela suspiró aliviada, un destello de tranquilidad brilló en sus ojos. De cualquier manera, por fin se había resuelto ese asunto.
En ese momento, Simón la llamó por teléfono, emocionado grito: “Gabi…”
Luego, no pudo decir nada más. Estaba tan impactado que su vista se oscurecia constantemente
“Papá, ya está todo bien, descansa“.
Simón abrió la boca, pero solo sabia a amargura, después de un minuto, preguntó: “Sebastián lo hizo?“.
“Si“.
Simón se calló. Pensaba que él no sentia nada por Gabriela, pero habia bloqueado los negocios de la familia de La Rosa y al mismo tiempo los
habia salvado de la bancarrota
“Bueno, bueno, ire a la familia Sagel personalmente para agradecerles“.
Gabriela frunció el ceño. “Papa, no tienes que hacer eso. Sebastián bloqueo los negocios de la familia de La Rosa porque tú y el abuelo Sagel se estaban comunicando demasiado. En aquel entonces, el abuelo intentó atarlo a través del matrimonio, pero ya viste el resultado, dejó a todos y se fue al extranjero por tres años. Sebastian odia ser controlado, la familia de La Rosa puede sobrevivir si no lo buscan proactivamente”
Simón se secó las lágrimas, aún no se habia recuperado de la sorpresa de que la familia de La Rosa se habia salvado y al escuchar las palabras de su hija, sintió un dolor agudo en el corazón.
“Lo entiendo, Gabi, aun asi, quiero que tomes las riendas de la empresa“.
Gabriela, una diseñadora de interiores, ya estaba lidiando con muchos clientes y entendiendo el mercado de decoración, ya había hecho su pasantia en la base Incluso cuando Simón perdio la razón, siempre estuvo decidido a entregar la empresa a su hija, Incluso si Maximiliano estaba tratando de ganarse su afecto, sólo estaba considerando darle una pequeña participación en la familia de La Rosa.
Gabriela de repente se quedó callada, no queria hacerse cargo. Una vez que terminara el diseño de Jardin del Ebano, encontraría una manera de entregar las casas de Jaime Orozco a otros en el estudio, y luego comenzaria a retomar su carrera artística. De lo contrario, cuando el Maestro Smith regresara, no podria explicarle
Su próximo objetivo era alquilar un estudio y participar en competencias internacionales de pintura
Simon tosio un par de veces, sabiendo que ella estaba incómoda “Con mi salud, solo puedo aguantar dos años más, después de eso, tendrá que
ser tuyo”
Gabriela se quedó sin palabras, porque incluso si Simon descansaba, solo podria aguantar un año. Y en ese momento, después de soportar tanto el golpe de la empresa como la traición de Lorena, se había envejecido de repente.
Probablemente no aguantaria un año. Gabriela se sintió cansada de nuevo, un cansancio que se filtraba desde sus huesos, dejandola sin saber qué hacer. Si fuera su madre, probablemente preferiria que siguiera su propio camino, en aquel entonces, en el Instituto de Bellas Artes de San José, fue oprimida hasta no tener a dónde ir, por eso se vio obligada a seguir el camino del diseño de interiores.
Simon no recibió una respuesta de ella, y empezó a loser aún más fuerte, mirando la sangre en la manta, sus pupilas se contrajeron ligeramente.
Escuchó la voz de Gabriela
“Papá, déjame pensarlo, dame tiempo“.
Simon no dijo nada, simplemente miró la mancha de sangre en la manta en blanco. La enfermera entró justo para cambiar la medicación, vio la mancha de sangre en la manta y rápidamente cambió por una nueva.
“Sr de La Rosa, por favor, mantenga la calma, no se altere“.
Simón estaba sentado en la cama, pálido, con un rastro de sangre en los labios. ¿Podría aguantar los dos años más que dijo?
Gabi tendria que mantener su matrimonio con Sebastián, de lo contrario, no tendría a quien recurrir.
Despues de colgar el teléfono, Gabriela se fue a dormir agotada, durmió hasta el atardecer, sintiendo que habia recuperado su energia. Se froto los ojos, se lavó la cara para despertarse, escuchó el tono de su celular, y de inmediato se puso nerviosa, pero al ver que la fuente del mensaje
no era Sebastián, respiró aliviada.
Si Sebastián la invitara de nuevo esa noche, probablemente se desmayaria en su habitación.
El mensaje era del Maestro Smith y ella inmediatamente le devolvió la llamada.
“Maestro Smith”
Lo llamó y se oyó una risa sonora al otro lado del teléfono: “Escuché que le casaste con el nieto de Abuelo Sagel? El si que sabe aprovecharse yo tenia pensado presentarte a alguien mejor, Sebastián era un niño muy travieso, nada maduro como su hermano, yo originalmente pensaba presentarte a su hermano, pero….
El Maestro Smith era el artista más artistico que Gabriela habia conocido, era una figura representativa de la pintura, sus obras valian una fortuna. Siempre estaba viajando, buscando inspiración y cambiando constantemente su entorno
“Penny, recientemente voy a vender una pintura, mira a ver si te gusta, si te gusta, te la dare como regalo de bodas“.
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Capitulo 393
Les pinturas del Maestro Smith, valían una fortuna. La primera vez que él vio las pinturas de Gabriela, le puso el nombre de Penny, que significa tranquila, imaginativa, y talentosa en el arte. En ese entonces, Gabriela todavía estaba en Ciudad Santa Cruz, él estaba viajando por todos lados, y por casualidad vio cómo ella estaba pintando. Inmediatamente decidió tomarla como su aprendiz.
Recordandolo