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Capitulo 133
Capítulo 133
Durante todos estos años, nunca había sido ella la que iba a buscar a Simón para pedirle dinero. Simón también siempre estaba ocupado con sus propios asuntos, rara vez pensaba en ello.
A su lado estaba Lorena Garcia, Nerea de La Rosa y Maximiliano de La Rosa.
Gabriela también trabajaba, en realidad no le faltaba dinero.
Ella simplemente no se esperaba que el dinero que había pedido prestado a Simón la última vez debido a dificultades, le fuera retirado ahora Sus labios se movieron levemente.
*Papá, cuidate, tengo cosas que hacer, me voy.”
“Vete, tu presencia solo me irrita, si ya te casaste, deberias comportarte como una casada.”
Gabriela no dijo nada, solo asintió y salió, cerrando la puerta de la habitación.
En el ascensor, se encontró con Nerea que venia a visitar a su padre.
Nerea se veia un poco mal, pero sus ojos se iluminaron al verla.
Gabriela recordó lo que su padre acababa de decir, sabiendo que su hermanita había hablado de más delante de él.
Así que ella simplemente asintió y preguntó. “¿Te has recuperado?”
“He mejorado mucho, ¿volviste a discutir con papa? Te ves un poco mal”
Gabriela no queria hablar más, “Tengo que trabajar, me voy, quédate un rato más con él.”
Nerea obedeció y dijo. “Está bien.”
Cuando Gabriela se fue, la sonrisa en los ojos de Nerea desapareció, parecía un poco afligida.
Originalmente planeaba acercarse a Sebastián en la fiesta, pero Sebastián no se presentó
Paso toda la noche sintiéndose decaida, por lo que volvió al hospital para descansar.
Le costó mucho trabajo ajustar su estado de ánimo, esa noche incluso se puso su vestido más bonito.
Habia decepción en sus ojos, pero sabia que no debía ser impaciente, siempre habria oportunidades en el futuro.
Después de subir al coche, Gabriela sintió un dolor de cabeza, inmediatamente contacto a la agencia de bienes raices para ver si podia cancelar la transacción de la casa que había comprado.
Pero la otra parte fue muy firme, el proceso ya estaba en marcha, y no podian devolver el dinero ahora.
Gabriela se sentia irritada, y en ese momento Susana volvió a llamar.
Suspiro y contestó el teléfono.
“Gabi, acabo de hablar con tu papa… Fue mi error, fui demasiado impaciente.”
Gabriela tampoco quería reprocharle demasiado.
En aquel entonces, cuando su padre estaba ocupado con el trabajo y su madre estaba dando a luz, fue Manuel y Susana quienes la llevaron al hospital
La familia de La Rosa no siempre había sido rica.
Pero ahora Simón no quería retroceder, porque había trabajado duro durante muchos años, y no queria que sus esfuerzos fueran en
vano
Gabriela lo entendia, pero también empezaba a sentir que su padre se volvia cada vez más despiadado.
Podia comprarle fácilmente una mansión de varios millones a Maximiliano, pero se olvidaba de la ayuda que Manuel y Susana le habian dado en el pasado.
Lo que Leo hizo fue demasiado, pero transferir todo su odio a la familia Orozco y cortar la relación también estaba mal.
“Gabi, lo siento mucho, dijiste que te encargarías de esto, pero estamos hablando de ocho millones de dólares, nunca he visto tanto dinero en mi vida, pensé en pedirle prestado a tu padre, pero siempre ha estado cauteloso de nuestra relación.”
La voz de Susana también se quebró un poco, durante estos años, ella y Manuel habian estado tratando de compensar el error de Leo.
De hecho, el dinero que Leo había robado, Manuel ya se lo habia devuelto a Simón.
*No te preocupes, encontraré la manera de conseguir este dinero, tu solo cuidate de Manuel
“Oli dice que tu mando es un mal hombre, es cierto? Gabi, si no eres feliz, deberias divorciarte.”
Gabriela tomó una profunda respiración, “No es necesario, no me voy a divorciar, mi relación con mi marido está muy bien, no
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escuches esos rumores.”
Bajo la cabeza para no preocupar a la otra parte y para detener a Susana de buscarle un nuevo compañero, simplemente dijo, “Nos amamos mucho y él es realmente maravilloso.”
Cuando colgó el teléfono, vio a Sebastián que estaba parado no muy lejos, y junto a el estaba Jaime Orozco
Sebastián tenia una herida en la mano que estaba sangrando, parecia que se habia abierto accidentalmente. Por ello, acudió al hospital para que le atendieran y cuidaran la herida
Y Jaime fue quien vino con él.
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