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Capitulo 75
Esta fue su primera vez discutiendo con una chica, y le pareció curioso. Oriel se negó rotundamente a admitir que se debía a que Cecilia se atrevía a discutir con él y descubrió que eso le resultaba extraño, por eso toleraba su audacia.
Tengo una mujer a la que amo profundamente, la he amado durante más de una década, no necesitas preocuparte, incluso si quieres casarte conmigo, no te aceptaré“.
“¿Tu amada todavía está preocupada por el Sr. Ibarra? El Sr. Ibarra es de Tatiana, ya están casados, ya han realizado los trámites matrimoniales, incluso si no se ha hecho público, no pueden negar que son una pareja legitima. Deberías persuadirla a que se rinda“.
Oriel preguntó sombriamente: “¿De dónde sacaste todo eso?”
“El otro día llevaste a tus hombres a buscar a Tatiana, lo vi y lo escuché todo“.
Oriel se dio cuenta de repente, no era de extrañar que esa mujer supiera tanto. “No necesitas meter tus narices en mis asuntos“.
“Que curioso, parece que quiero meterme en tus asuntos ¿Qué tengo que ver contigo, por qué debería preocuparme por tus problemas?”
Oriel se quedó sin palabras. Debia estar resfriado y con fiebre, su cerebro debia estar tan confundido que ya no podia responder a esa mujer.
Dejo de hablar y Cecilia se calmo
Después de un rato, Oriel de repente dijo: “Sara vendrá en un rato, ¿podrias cooperar conmigo en una actuación? Si cooperas conmigo, te dejare ir, no necesitarás ser mi criada, y no te molestaré más en el futuro“.
Cecilia estaba a punto de empezar a trapear el piso, pero cuando escucho eso, se detuvo, lo miro y preguntó “¿Quieres que finjamos ser una pareja para que Sara se enoje y se vaya, o quieres que Sara se ponga celosa?“.
Oriel no dijo nada, lo cual era una especie de acuerdo, se pregunto: “¿Ella puede leer mentes?”
“Prefiero seguir siendo tu criada” Cecilia comenzó a trapear el piso con seriedad.
Oriel se quedo atónito, no esperaba que Cecilia se negara: “Puedo darte dinero”
“¿Parezco el tipo de chica que venderia su cuerpo por dinero? Soy una chica decente“.
“Mil–dolares”
Cecilia continuó trapeando.
Oriel aumentó la oferta: “Diez mil dolares“.
Cecilia seguia trapeando.
Oniel subió la oferta otra vez “Veinte mil dólares“.
Cecilia se detuvo y dijo. “Sr. Basurto, no se trata de dinero, sino de que no quiero que tu amada me cause problemas en el futuro. Tatiana y yo somos buenas amigas, abrimos Cafe Serendipia juntas, Sara considera a Tatiana como su rival, seguramente seguirá causandole problemas a Tatiana. Si coopero contigo para actuar, Sara también me considerará una rival y me buscará problemas constantemente. Tatiana tiene al Sr. Ibarra para protegerla pero yo no tengo a nadie, yo si corro un grave peligro“.
“Te prometo que estarás segura, no permitiré que Sara te lastime Oriel solo queria ver como reaccionaria Sara cuando viera que él era amable con otra mujer Aunque siempre criticaba a sus secretarias, esas mujeres realmente cometieron errores, lo que no significaba que realmente le importara.
“Cecilia, si cooperas conmigo en esta actuación, te daré cien mil dólares, la obra terminará y transferire el dinero a tu cuenta de inmediato, y prometo que no permitire que Sara te lastime“.
Tal vez cien mil dólares!
“Al actuar conmigo, no pierdes nada, muchas mujeres quieren tener rumores conmigo con estas condiciones”
Nunca buscó a mujeres de fuera para actuar porque temía que se lo tomaran en serio y realmente lo consideraran su novio, y no podría deshacerse de ellas luego
Cecilia era amiga de Tatiana, y Tatiana era la esposa de Yago, Yago era su enemigo, por lo que Cecilia era su enemiga. Seguro que no se enredaria con el
por esto
Gastar cien mil dólares para probar los sentimientos de Sara por el, Oriel penso que valia la pena, de todos modos, tenia mucho dinero.
“Si temes que vaya a echarme atrás, puedo transferirte el dinero a tu cuenta primero“.
Cecilia le paso a Oriel su número de cuenta bancaria sin pensarlo dos veces. Oriel quedó mudo al instante ¿No decía que no se venderia por dinero? ¿Donde quedaron sus principios?
Aun así, transfirió rápidamente los cien mil dólares a la cuenta de Cecilia, ella revisó el mensaje que le llegó del banco, confirmó que realmente habia recibido el dinero y de inmediato se le iluminó la cara con una sonrisa.
“La verdad es que siempre quise ser actriz, pero mis padres no estaban de acuerdo. Sin embargo, siempre he soñado con ser actriz Como el Sr. Basurto confia tanto en mi, haré todo lo posible para seguir su guion. ¿Quién sabe? Tal vez podría ganar un Oscar despues”
Oriel no pudo evitar rodar los ojos, se ponia tan feliz con el dinerol
“¡Empieza a limpiar ahora!“.
*Claro!” Cecilia ganó fácilmente cien mil dólares y comenzó a limpiar con alegria
Oriel la observaba, sintiéndose incómodo, pero no podia expresar sus sentimientos. Después de todo, fue él quien ofreció darle dinero y pedirle que cooperara con su actuación. Era su decisión, pero en ese momento él era el que estaba herido.
Después de limpiar, Cecilia entró felizmente en la cocina para cocinar. Parecia que Oriel la oyó hablando por teléfono con Tatiana en la cocina. Aunque no
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podia oir claramente, escuchó su risa.
¿Pensaba que, si se tapaba la boca para reir, él no la escucharía? Tenia buen oldo
Tatiana, después de colgar el teléfono, miró la pantalla de su computadora y se quedó pensando. Después de un rato, se dio una palmada en el muslo y se dijo a sí misma: “¿No acabo de encontrar un nuevo tema para escribir?”
¿Cecilia se arrepentirá de haberle contado eso a su amiga si se enteraba de que Tatiana la estaba poniendo como la protagonista de su nueva obra junto con Oriel?
Dicho y hecho. Tatiana cerró el archivo que estaba trabajando, abrió uno nuevo y comenzó a escribir su nueva obra. Los protagonistas serian un par de enemigos que se aman.
Primero estaban en conflicto, luego se amaban con locura, luego alguien venia a arruinarlo todo, seria un éxito segurol
Yago le dio una uva sin semillas y Tatiana volvió a la realidad. Cuando levantó la vista y vio los ojos profundos del hombre, le preguntó mientras masticaba su uva: “¿Qué pasa?”
Yago le preguntó con una sonrisa: “Yo debería preguntarte a ti que pasa. Estabas alli riéndote como un ratón que ha robado algo. Mira, todos te están mirando”
Tatiana miró a los clientes en la tienda. Dios mio, ¿cuándo llegó tanta gente all?
Todos los ojos estaban puestos en ella, habia estado imaginando cuánto dinero ganaría con su nuevo libro y no pudo evitar reírse de felicidad ¿Habría asustado a los clientes?
“No pasa nada. Acabo de hablar con Cecilia y me contó unos chistes. Cada vez que lo pienso, me parece muy divertido Jajaja, es realmente divertido”
Todos: “Ah, eso es todo”
Pensaban que algo andaba mal con la dueña de la tienda, que de repente se echó a reir tan fuerte, incluso sonaba aterrador
Tatiana pensó Realmente era tan extraña mi risa?”
Cuando la atención de todos se apartó de ella, Tatiana le hizo una señal a su novio y él se acercó de inmediato, ella le dio un rápido beso en la cara.
“Cariño, déjame contarte algo divertido. Tu competidor acaba de pagarle a Cecilia cien mil dólares para actuar con él para provocar a Sara, para ver si la Srta. Perez tiene sentimientos por el“.
Yago no podia creer que su competidor haría algo tan estúpido!
En ese momento, Oniel pensó ¿Quien dijiste que era estúpido?”
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