Capítulo 22
“Con un montón de esfuerzo la conquisté, ¿quién más que ella merecería mi cariño?“. Las palabras de Yago hicieron que Eloy lo mirara fijamente.
Este último se levantó, apoyó las manos en la mesa, se inclinó un poco hacia adelante y dijo con una sonrisa: “Sr. Ibarra, Yago, somos jefe y subordinado, amigos, y también compañeros de escuela. Fue tu recomendación la que me llevó a unirme a tu Aurius Consorcio”
“Trabajé aqui durante varios años, y hubo muchas ofertas tentadoras con sueldos más altos, incluso tu competidor Oriel me buscó varias veces. Pero mira, no me fui, siempre trabajé lealmente para ti. No puedes esconderme nada, ¿verdad?”
“¿Tu esposa es esa mujer que tanto amas? ¿Es la mujer que admiraste durante tantos años y finalmente conquistaste? ¿Es esa chica llamada Sara?”
Eloy también habia oido hablar de la historia de Yago y Sara Aparte de ella, no podia pensar en ninguna otra mujer.
Su jefe era un hombre frio, nunca involucrado en chismes con mujeres. La empresa de entretenimiento de Aurius Consorcio había firmado a muchas estrellas y modelos, todas las que habian conocido a Yago se enamoraron de él, aunque podria ser por su posición y riqueza. Pero aparte de eso, Yago es genial por si mismo.
En el pasado, alguien intentó crear un escándalo para ganar fama a costa de él, pero al final, esa actriz que una vez fue muy famosa, ya fue olvidada y trabajaba en un supermercado.
Asi que, aparte de las ricas herederas, las estrellas y modelos ya no se atrevían a pensar en él, temian arruinar su futuro.
Yago se levanto, apartó a Eloy, y se fue rodeando el escritorio Eloy, recuerda, la esposa del CEO se llama Tatiana“.
¿Tatiana?
Eloy pensó inmediatamente en las ricas herederas de Atlántida, pero no recordaba a la familia Ruiz.
¿De que familia era esa Tatiana?
La curiosidad de Eloy fue despertada.
Tomo un archivo y rápidamente siguió a Yago, preguntándole curioso: “Yago, ¿qué hace la familia de la señora del CEO? ¿Cómo se conocieron? ¿Se casaron inmediatamente después de conocerse?”
Eloy nunca imagino que Yago se casaria tan repentinamente. Si no–fuera porque él habia publicado una actualización en las redes sociales la noche anterior, nunca habría sabido que su jefe estaba casado.
Por cierto, la esposa del CEO también era una escritora.
Te lo digo, mi esposa solo puede ser Tatiana Aparte de ella, ninguna otra mujer podría ser la esposa del CEO, así que no vuelvas a mencionar a Sara y esas cosas, para evitar que mi esposa piense que estoy engañandola”
Eloy se rindió
“A la reunion!“. El tono de Yago era muy serio.
Eloy sabia que no podia hacer más pregunta’s
“Bueno“.
Iris se acercó y siguió a Yago y Eloy hacia la sala de reuniones.
La reunion se celebró en la sala de conferencias del piso 86. En ese momento, todos los altos directivos ya habian llegado temprano y estaban esperando a su CEO, Yago.
Delante de Tatiana, Yago siempre se mostraba elegante y amable, mostrando su caballerosidad. Sin embargo, en la empresa, su imagen era fria e impasible. Aparte de Eloy, que se atrevía a ser un poco atrevido frente a Yago, nadie más se atrevía a actuar impulsivamente.
“Señor” Iris abrió la puerta de la sala de conferencias, y detrás de ella, Yago y Eloy entraron uno tras otro
Todos los altos directivos presentes se levantaron y gritaron al unisono “Señor
Yago asintió en reconocimiento e hizo señas para que todos se sentaran Se acercó a su asiento, tiró de la silla, justo cuando iba a sentarse, su telefono
sono
Frunció el ceño
Durante las reuniones, a Yago no le gustaba recibir llamadas, ni permitia que otras personas recibieran llamadas, por lo que todos ponian sus telefonos en silencio al entrar a la sala de conferencias.
Yago sacó su teléfono, planeaba colgar la llamada, pero al ver que era Tatiana quien llamaba, respondió de inmediato.
“Tati“. Yago no sólo respondió la llamada, sino que también lo hizo con un tono suave, eso sorprendió a todos los presentes
El jefe, el maldito CEO, resultaba que sabía usar un tono cariñoso cuando decia el nombre de una mujer Yago siempre tenia dos celulares, uno para los altos mandos de la empresa y los socios, y otro para la gente cercana, la familia y los amigos
Así que, aunque posteó algo en las redes, los altos mandos de la empresa no se enteraron de que su CEO ya se habia casado. Eloy, aunque estaba al tanto de todo, se quedó helado por la ternura de Yago. Incluso llegó a sospechar que su jefe que tenia delante era un impostor
“¿Estás ocupado, Yaguito?“, le preguntó Tatiana con una sonrisa. Al oir su risa, la cara de Yago se volvió aun mas dulce.
Todos los presentes se grabaron en la memoria a una mujer llamada Tati, la consentida de su jele, a quien debian tratar con respeto. No podian darse el lujo de ofender a esta tal Tati en el futuro. Pero al parecer, ninguna mujer llamada Tati habia venido a buscar a su jefe en las ultimas veces
“No estoy ocupado, ¿necesitas algo? ¿Necesitas ayuda?“.
incluso a punto de entrar a una reunión, claramente estaba ocupado, pero insistió en que no lo estaba
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Eloy pensó para sus adentros: “Por supuesto, un hombre enamorado no puede ser tratado como a una persona normal”
“No necesito que vengas, estoy en una tienda de muebles, eligiendo una cama para ti. Te enviaré fotos. Mira cual te gusta y la compraré“.
Habla poca gente en la tienda por la mañana, y con dos dependientes, Tatiana decidió pedir prestados dos mil dólares a su hermano. Con los regalos y propinas que había recibido, incluso después de dividirlos con el sitio web y descontar los impuestos, tenia decenas de miles de dólares en sus manos.
Aunque el dinero aún no estaba en sus manos, Tatiana ya estaba muy feliz y pidió prestados dos mil dólares a su hermano para tratar bien a su marido.
“Bien, enviame las fotos de las camas que te gusten, yo te digo cuál me gusta“. Aunque dijo eso, se sintió un poco triste: las oportunidades de quedarse en su cama se estaban volviendo cada vez más escasas. Y se debía a él mismo
“Bien, entonces no te molestaré más, en un rato te enviare las fotos. ¿A qué hora terminas de trabajar al mediodia? Puedo ir a buscarte y luego invitarte a comer. Podemos dar una vuelta por el paseo peatonal, te compraré ropa también”
Lo que prometió, lo cumpliría. Después de todo, la tranquilidad que podia disfrutar en ese momento, era todo gracias a Yago.
Si no fuera por él, probablemente tendria que haberse enfrentado a una madre que la presionaba para casarse todos los días, incluso tendría miedo de
volver a casa
Al escuchar eso, Yago sonnió y dijo: “No termino de trabajar hasta las doce del mediodia. Hace mucho calor a esa hora, no necesitas venir, me preocupa que te quemes al sol, puedes esperarme en la tienda”
Tatiana tambien sonrio: “Está bien, te esperare en la tienda“.
Antes de colgar el telefono, Tatiana añadió “Yaguito, eres realmente considerado“.
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