Capítulo 100
Esa charla sonaba muy molesta.
Ela se volteó hacia la que hizo ese comentario, viendo a Liliana del departamento de limpieza. Liliana, de unos treinta años, era la segunda empleada más joven del departamento.
Se cuidaba mucho, con la piel firme y una figura bien mantenida.
Muchos hombres del departamento de seguridad la encontraban atractiva. Pero ella siempre los ignoraba, nunca les dedicaba una segunda mirada
Siempre habia querido limpiar los pisos más altos de la empresa para estar cerca de Asier.
Desde el día en que Elia llegó a Grupo Griera, Liliana no la soportaba. Incluso habia discutido con la directora Fernanda sobre esto. ¿Por qué Elia fue enviada a limpiar los pisos de arriba en lugar de ella?
Los pisos superiores eran todos de la élite. Si ella pudiera limpiar alli, definitivamente ampliaria sus horizontes y vería al Sr. Griera todos los días.
Liliana queria desesperadamente limpiar los pisos de arriba, pero la directora Fernanda eligió a Elia.
Liliana estaba muy descontenta con Elia
Estos comentarios sarcasticos hicieron que Elia se sintiera incómoda, estaba a punto de replicarle
Los empleados a su alrededor también comenzaron a juzgarla.
“Está dispuesta a hacer cualquier cosa para seducir al Sr. Griera. Este mundo está lleno de todo tipo de personas.”
“Parece tan inocente e ingenua. No puedo creer que sea así. Pobre Maribel, la usaron como un trampolin.”
“Es muy extraño. El Sr. Griera debería saber que ella es quien está difundiendo esos rumores, ¿por qué no la despide?”
“Entró al Grupo Griera con el DNI de otra persona, y el Sr. Griera no la despidió. Esto prueba que los rumores son mitad verdad, mitad mentira. Seguro que tiene alguna forma de engañar a nuestro Sr. Griera.” Liliana miró con hostilidad, tratando de controlar la opinión pública.
En ese pequeño ascensor, Elia se convirtió en el blanco de criticas de todos, estaba a punto de ser ahogada por los comentarios que venían de todos los lados.
No pudo soportarlo más, se rio friamente y dijo: “Sólo los idiotas se dejan guiar por palabras seductoras. Todos sabemos quiénes son los inteligentes y quiénes son los idiotas.”
Elia no intentó aclarar su situación, porque la mayoría de las personas no podian entender su situación.
Sólo llevando la situación hacia la otra parte, podria hacer que su enojo fuera evidente. Eso los haria callar!
No tenia pruebas para demostrar su inocencia. Pero conseguiría las pruebas, y cuando lo hiciera, las arrojaria en la cara de aquellos que la estaban atacando.
Todos se miraron entre sí. Nadie queria admitir que era el engañado, ¿quién querría admitir que es un idiota?
¿No era eso exactamente lo que habian hecho?
Después de decir esto, ya nadie seguía hablando de eso.
Al llegar al décimo piso, Elia y Liliana salieron juntas.
Liliana le echó una mirada y se dirigió a su departamento.
Elia la miró con indiferencia, sin decir nada.
Sabia que Liliana le guardaba rencor. Ahora que Liliana tenía la oportunidad de difamarla, por supuesto que no lo dejaria pasar.
Liliana se registró y se fue a trabajar, Elia se registró después de ella.
Tomó sus utensilios de limpieza y tomó el ascensor hasta el piso más alto. Iba a buscar a Asier, a pedirle que exportara los videos de la cámara de seguridad de aquel día para probar su inocencia.
Llegó a la puerta de la oficina del Sr. Griera y llamó suavemente.
–“Adelante!” La voz que venía de la oficina no era la de Asier, sino la de la secretaria Maribel
Elia entró y vio a Maribel ocupada ordenando papeles al lado del escritorio. Pero la silla del presidente estaba vacia, Asier no estaba.
Así que se dio la vuelta y salió de la oficina.
