Capítulo 64
Ciro llevó a Tiberio a la sala de su casa y dijo casualmente: “Siéntate donde quieras”.
Tiberio dijo indiferente: “Mantén la calma, joven Pinales”,
“¿Por qué? ¿Vas a cuidarme por Isadora?”
“Isadora no tiene tanta influencia, pero tu hermano me pidió que te protegiera”.
¿Su hermano?
Ciro se sorprendió un poco.
Resulta que Saulo había pedido a Tiberio que ayudara a Ciro… había sido amable y educado con él.
Pero Jasmina era su hermana legitima. No podía creer que él hubiera tomado partido por su medio hermano
en este asunto.
Ciro se sintió confundido por un momento.
“¿Qué hace Tiberio aqui?”, preguntó un hombre de mediana edad en pijama que apareció de repente.
Ciro lo vio y sintió la tensión de encontrarse con un padre, gritando: “Papa”.
Tiberio se levantó, asintió al anciano y dijo: “Sr. Pinales, lamento molestarlo tan tarde”.
Damián no miró a Ciro ni siquiera una vez, como si fuera invisible.
Vino, invitó a Tiberio a sentarse y dijo sonriendo: “No es molestia, ojalá vinieras más a menudo a tomar té
conmigo”.
Tiberio dijo con indiferencia: “No tengo tiempo para tomar té. Vine aquí para manejar algunos problemas
dificiles”.
“¿Qué problema serían dificil de manejar para Tiberio?”
“Se trata de la señorita Pinales”.
Damián inmediatamente mostró una gran sonrisa y dijo: “Tiberio finalmente ha cambiado de opinión, ¿está pensando en casarse con nuestra Jasmina?”
Tiberio sonrió a regañadientes y dijo: “Sr. Pinales, no bromees, no tengo ese plan”.
La cara de Damián se oscureció y dijo: “Tiberio, mi hija Jasmina ha estado esperándote durante diez años, y todo el mundo cree que ustedes dos son una pareja. ¿Así la tratas?”
Jasmina entró y sintió que su corazón latia fuerte al escuchar a su padre preocuparse por ella.
No intervino, si su padre pudiera hacer que las dos familias se unieran, estaría encantada.
Aunque Tiberio no la amaba, jella queria ser la señora de la familia Ramos!
Tiberio dijo indiferente: “Sr. Pinales, ¿cree usted que soy ciego? Hoy en dia, todo el mundo conoce la reputación de la señorita Pinales. La familia Ramos no querría que me casara con una mujer asi”.
Estas palabras hicieron que la cara de Jasmina se enrojeciera al instante.
De repente, Damián y Jasmina se quedaron en silencio, con caras extremadamente feas.
Tiberio no mostró respeto a la familia Pinales, fue sorprendente que se atreviera a decir esas palabras directamente.
Ciro pudo reirse en secreto, solo alguien como Tiberio, con ese estatus, se atreveria a desafiar a su padre.
Fue entonces cuando Damián frunció el ceño y dijo: “¡Hay una historia detrás de esto! Hay muchos malentendidos… Tiberio, si tienes paciencia, siéntate y escúchame.
“No es necesario, todo esto no es importante para mi. Aun si este problema no hubiera ocurrido, no me habria casado con su hija”.
“Tiberio, ¿qué crees que somos? ¿Por qué nos desprecias tanto?” Mientras gritaba, Damián habia expresado toda su ira acumulada a lo largo de los años.
Este grito repentino hizo que Ciro temblara de miedo, pero Tiberio no mostró ningún temor.
¡Esta era realmente una lucha entre los lideres de las dos grandes familias!
“Señor Pinales, no lo entendiste mal, la profunda amistad entre la familia Ramos y la familia Pinales no necesita un matrimonio para mantener una relación amistosa entre las familias”.