Capítulo 118
¿No será que se asustó tanto que alucinó?
Vio a Patricio fruncir el ceño y decir. “Tiberio, ¿quieres decir que si tu abuelo no acepta a esta chica como tu esposa, acatarás mi decisión?”
Tiberio respondi con indiferencia: “No”.
Patricio soltó una risa sarcastica. “Entonces de qué sirve lo que dices?”
“Mi abuelo tiene derecho a no estar de acuerdo con mi matrimonio, pero yo también tengo derecho a convencerlo.”
Después de decir eso, Tiberio echó un vistazo a la niña distraída junto a él Isadora, llámalo ‘abuelo.*
Isadora se recompuso y llorando, obedeció: “Abuelo…”.
Patricio la ignoró y continuó dirigiéndose a Tiberio Ah? ¿Y cómo piensas convencerme?”
“Tiberio, ¿acaso piensas ignorar a tu tio? ¡Papá! ¡Soy la víctima! ¿Cómo puedes seguir ignorándome?” exclamó Xavier con indignación. Isadora lo miró enfadada: “Te lo mereces!”
“Mocosa impertinente! Aún no he ajustado cuentas contigo, ¡me has lastimado dos veces, más una en el hospital, tres veces en total! ¡Hoy, definitivamente te haré arrepentirte!”
“No creo que te atrevas a hacer nada! Si tienes coraje, enfrentame uno a uno! ¡No importa cuántos pervertidos como tú me enfrenten, no me asustan!”
El rostro de Xavier estaba enrojecido por la humillación al ser amenazado por una niña frente a toda la familia. Estaba a punto de atacarla para recuperar su honor, aunque no sabia si podría ganar, pero tenía que devolvere el golpe o la gente pensaría que era fácil de intimidar. Sin embargo, su madre lo sujeto.
Veronica Ramos soltó una risa sarcastica: “Vaya, esta niña tiene agallas. Me gustaría ver cómo, delante de mi, le das una lección a mi hijo Isadora frunció el ceño y le preguntó a Tiberio: ¿Tio, quién es esta?”
“La amante de mi abuelo… Se casaron después de que ella quedara embarazada cuando era joven y luego, gracias a su hijo, ganó riqueza y estatus.” Isadora preguntó en voz baja, pero Tiberio contestó en voz normal sin importarle.
El rostro de Verónica se puso rojo de ira: “Tiberio! Soy mayor que tú y la esposa legitima de tu abuelo. ¿Cómo te atreves a hablarme asi delante de otros? Patricio, tu nieto es un insolente!”
Patricio frunció el ceño: “¡Tiberio!”
“Aunque me lo pregunte alguien más, respondería lo mismo… Es la verdad, acaso ella misma no se atreve a reconocer lo que ha hecho?” *Ella es mayor que tú!”.
“Abuelo, no me pangas en una situación dificil… Isadora será parte de la familia Ramos algún día y se enterará de todo esto.”
Patricio fulminó con la mirada a Tiberio.
Xavier soltó una carcajada fría: “¿Ella, una estafadora, se atrevería a ser parte de la familia Ramos? ¡Tiberio! Te lo digo, fui victima de ella, así que debes entregarla a mi para curarme o no saldrán de aquí hoy.”
Tiberio respondió con sarcasmo: “¿Ah? ¿Desde cuando la familia Ramos está a cargo de ti?*
“Papá, no me importa. He estado tratando esta enfermedad durante más de un mes y no mejora. Sólo entregándome a esta chica podré curarme, no puedes simplemente observar cómo me vuelvo impotente siendo tan joven, ¿verdad?”
Isadora se sintió asqueada de nuevo y con una mirada feroz, gritó: “Muérete pervertido! ¡Ni la sueñes! ¡Alguien como tú no merece tener hijos! ¡Esa mujer con la que estabas coqueteando ese dia ya estaba casada! Cuando encuentre pruebas y se lo diga a su marido, jel no te dejará salir impune! ¡Provocas problemas y no tienes vergüenza!”